El año nuevo siempre trae una nueva oportunidad de cambio, y este año más que nunca, muchos de nosotros sentimos que hay margen para mejorar nuestras vidas.
Ya sea que desees mejorar tu estado físico, fortalecer tus relaciones o lograr el equilibrio entre el trabajo y tu vida, el comienzo del año es un excelente momento para reevaluar y fijar nuevas metas. Si tienes la sensación de que te falta algo, o de que podrías sentirte más fuerte, más realizado o apacible, ¿qué cambios realistas puedes hacer para alcanzar el equilibrio?
Aquí te damos algunas medidas simples y efectivas que puedes tomar para que este sea el año en el que te sientas mejor en cuerpo, mente y espíritu.
Consulta a tu médico de atención primaria
Haz una cita e inicia una conversación abierta y honesta sobre tus metas de salud y lo que tú y tu equipo de atención pueden hacer para alcanzarlas.
Habla sobre tu salud emocional y mental y cualquier inquietud que tengas al respecto. ¿Cómo está tu capacidad de atención? ¿Estás demasiado cansado? Todo está relacionado con tu bienestar general.
Es probable que tu médico comience con un examen físico para conocer los valores de referencia de la presión arterial, el azúcar en sangre, el colesterol y otros factores importantes. De esa manera, se puede controlar el progreso de tu salud y hacer modificaciones en el estilo de vida o los medicamentos si es necesario.
Comienza a moverte
Crea un plan y comienza un horario de actividad física a un ritmo que no te permita mantener una conversación. Hazlo todos los días durante 30 minutos.
Comenzar es tan simple como caminar en una dirección durante 15 minutos y luego regresar.
Descansa cuando lo necesites
La actividad física es importante, pero también lo es el descanso. Sin el tipo adecuado y la cantidad correcta de sueño, no puedes funcionar, recuperarte, estar y mantenerte saludable, además de controlar el peso o mantener la cordura. Necesitas dormir de 7 a 8 horas por noche, y si no puedes, tu médico debe saberlo.
Come, hidrátate y cuida tu salud
Tu médico puede darte recomendaciones nutricionales de acuerdo con los resultados de tu examen físico. Si necesitas bajar de peso, prepara comidas saludables con anticipación para evitar la tentación de comer fuera o elegir comida rápida y procesada. Bebe agua, mucha, y que sea la mayor parte de lo que bebes.
Nutre tu salud mental y emocional
Es natural querer dejar atrás el estrés y la negatividad de los últimos años, pero también es importante reconocer que un nuevo año también puede traer nuevos desafíos. Atraviesa estos cambios con tranquilidad y presta atención a las señales de las consecuencias físicas y emocionales del estrés y la ansiedad tanto en ti como en tu familia. Las señales de alerta incluyen:
- Ira o irritabilidad
- Sensación de desgaste
- Falta de motivación
- Reacciones físicas, como dolor de cabeza, dolores, problemas estomacales y erupciones cutáneas
- Tristeza, desesperanza y depresión
- Dificultad para concentrarse o dormir
- Empeoramiento de afecciones crónicas o de salud mental
Cuando comiences a notar estas señales de alerta, adopta una actitud proactiva en el manejo del estrés buscando el apoyo de tus seres queridos y ocupándote en actividades que disfrutas.
Comienza bien el año programando un examen físico anual con un médico de atención primaria. Haz clic aquí para encontrar a un doctor primario cerca de ti.
